La tarde de ayer fue decisiva. Hace
meses, que el país pareciera estar a la deriva frente a la deuda externa, sin
embargo, logró mostrarse seguro y con un plan a futuro apoyada por el G77 +China. Argentina impulsó una propuesta que busca un nuevo marco jurídico para los
a los procesos de reestructuración de deuda.
La iniciativa recibió una respuesta favorable:
La iniciativa recibió una respuesta favorable:
- Votos a favor: 124
- Abstenciones: 41
- Votos en contra: 11
- La mayoría de los países latinoamericanos votaron a favor
- Estados Unidos, Canadá y Japón entre otros países centrales formaron parte del bloque en contra.
El
representante de Bolivia en las Naciones Unidas, Sacha Llorenti Soliz, quien actualmente
preside el G77, fue el encargado de presentar la propuesta. El mandatario afirmó
que cree necesario y prioritario "crear un marco jurídico, con miras a
aumentar la eficiencia, la estabilidad y la previsibilidad del sistema financiero
internacional y el logro de un crecimiento equitativo e inclusivo". Lo
acompañó en la defensa de la iniciativa el canciller argentino, Héctor Timerman, adjudicándole al caso argentino
gran importancia por haber concientizado al resto de las naciones sobre lo que
en realidad merecen. A su vez, agregó que "la trascendente votación es la
expresión más contundente de la necesidad de "ponerle freno a la
especulación desenfrenada".
Las consecuencias sobre la economía argentina
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| Héctor Timerman indicó que la deuda externa "afecta la soberanía de los países y viola derechos humanos" Télam Argentina |
Si bien, el proyecto recibió una respuesta positiva por la mayoría de los países involucrados, el debate sobre las deudas contra acreedores se extenderá por varios meses. La decisión de la ONU podría incidir sobre el futuro de la Argentina frente al reclamo de los fondos buitres que tiene en vilo a la economía argentina.
